Después de tanto tiempo sin subir ninguna de mis creaciones, os traigo este postre sueco que está la mar de bueno y es facilísimo de hacer. La receta la vi un día en el programa de Canal Cocina llamado Cocina Nórdica, nada más verla me entraron ganas de hacerla y tengo que decir que me encantaron. Recomendadísima.
Ingredientes:
Ingredientes:
- 50 g de levadura fresca
- 500 ml de leche
- 150 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 150 g de azúcar
- ½ cucharada de sal
- 2 cucharadas de cardamomo molido
- 1 kg de harina
Para el relleno:
- 150 g de mantequilla
- 80 g de azúcar
- 2 cucharadas de canela
Para la cobertura:
- 1 huevo batido
- Azúcar de perla
- 100 ml de agua
- 100 g de azúcar
Elaboración:
Calentamos la mantequilla junto a la lecha a unos 37ºC.
Añadimos ahora la harina tamizada, la levadura previamente disuelta, el azucar, la sal, el cardamomo y mezclamos bien hasta que se integren todos los ingredientes y obtengamos una masa lisa.
Una vez integrados todos ingredientes, amasamos durante 10 minutos hasta conseguir una masa lisa y suave que no se pegue en las manos.
Introducimos la masa en un bol y la tapamos con un paño. Dejamos que fermente durante 1h más o menos, hasta que doble su tamaño.
Sobre la encimera ligeramente enharinada, estiramos la masa con ayuda de un rodillo hasta formar un rectángulo.
Mezclamos el azúcar, la mantequilla y la canela hasta formar una pasta, y extendemos la mezcla por toda la masa.
Por el lado del rectángulo más próximo a ti, comenzamos a enrollar tratando de apretar un poco para que luego no se nos abran los rollitos en el horno.
Con un cuchillo comenzamos a cortar las caracolas de aproximadamente 1 cm cada una y las vamos disponiendo en una bandeja forrada con papel de hornear, tomando la precaución de mantener cierta distancia entre ellas ya que todavía van a aumentar más de tamaño. Cubrimos las caracolas con un paño de algodón y dejamos leudar la masa durante 30 minutos aproximadamente.
Después de 15 minutos, precalentamos el horno a 220º C para que esté bien caliente en el momento de meter nuestros rollitos de canela.
Pasada la media hora de reposo, pintamos las caracolas con huevo batido y espolvoreamos con un poco de semillas de amapola, trocitos de almendra o simplemente con un poco de azúcar en perla.
Introducimos la bandeja en el horno durante 10 minutos o hasta que las caracolas adquieran su característico color dorado.
Las sacamos del horno y dejamos que se enfríen completamente sobre una rejilla. Pintamos los rollos con el agua con azúcarn y una vez fríos ya están listos.
Descargar receta | Bollos de canela suecos (PDF)
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